Hace poco vi una propaganda para motivar a las personas a leer la Biblia todos los días. El comercial decía esto: “Sólo toma unos pocos minutos al día”. Me pregunto: ¿Será posible que a nosotros los cristianos nos tengan que torcer la mano y darnos un incentivo como éste para que abramos la Palabra de Dios todos los días?
Si los que venden Biblias nos tienen que invitar a leer la Biblia diciéndonos que “Sólo toma unos pocos minutos”, estamos en problemas. ¿Será acaso una epidemia que existe hoy? Los cristianos no estan leyendo su Biblia.
Todos en algún momento de nuestra vida cristiana hemos descuidado la lectura de la Palabra de Dios. Dios mismo ha tenido que mostrarnos que separados de El nada podemos hacer como dice su Palabra aquí: “Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer.” Juan 15:5
Hoy quiero animarte a volver a buscar tu Biblia y leerla. La lectura, estudio individual y personal de la Palabra de Dios no debe ser nunca reemplazada por nada. En el mundo en que vivimos hay muchas cosas que pelean por nuestra atención de tal forma que no es difícil que nuestro deseo de leer la Biblia a diario sea reemplazado fácilmente.
Nuestro trabajo, las demandas del hogar y la familia, la recreaciones, las redes sociales, todo esto toma nuestro tiempo. Sin darnos cuenta el dia se nos pasa sin haber dado tiempo para la más grande prioridad que es nuestro momento a solas con Dios aprendiendo de El. No descuidemos por ningún instante el estar en la misma presencia del Señor. Dejemos que el autor de la Biblia nos hable en forma personal. Esto es lo que nos dará el poder para vivir diariamente en victoria.
No las voy a engañar, el estudiar y leer la Palabra de Dios no toma “Solo unos pocos minutos al día” como dice ese comercial. Es una decisión de querer conocer al Rey de Reyes y Señor de Señores en una forma mas íntima y para esto hay que dedicar tiempo. No es cuestión de “estrecharle la mano” a Dios como si lo estuviéramos saludando al pasar. Es mas bien sentarse, meditar, hablar con El y darle paso a que nos hable.
Escúchenme bien, cuando le damos oportunidad a Dios de hablarnos, ¡El lo hace! Si nuestra comunicación con El se mantiene cerrada, te pregunto: ¿Cómo es que esperas escuchar de El? Tu cita con Dios tiene que volver a tomar el primer lugar entre lo que has planeado hacer en el día. Que podamos decir como David: “Mi alma tiene sed de Dios, del Dios vivo; ¿Cuándo vendré, y me presentaré delante de Dios?” Salmo 42:2.
Gracias doy a Dios por la Biblia, sin ella no tendriamos dirección para vivir. Nuestra vida depende del alimento espiritual diario que nos trae. Necistamos el “pan de cada dia” como Jesus les enseño a sus discipulos a orar (Mateo 6:11) y Dios lo tiene disponisble para nosotros todos los días. Hay que salir a buscarlo todos los dias asi como el pueblo de Israel en el desierto salia a buscar la provisóon de Dios. Miren lo que nos dice Exodo 16:4:“Entonces el Señor le dijo a Moisés: Voy a hacer que les llueva pan del cielo. El pueblo deberá salir todos los días a recoger su ración diaria”
De acuerdo a este verso vemos que el pueblo tenía que salir a recoger su comida “todos los días”. Ellos mismos tenian que levantarse, salir de su carpa y recoger el sustento diario. ¡Era comida para cada día! no para la semana, tampoco para dos o tres dias. Es más, Dios les advirtió que no guardaran para el siguiente dia. ¡Dios tenía comida fresca para ellos cada día! Dios no dijo vayan los sábados o los domingos solamente a recoger su comida. Dios dijo “todos los días”.
La lección que podemos derivar de este pasaje es que Dios ha provisto su Palabra como sustento diario. Dios sabe que sin ese “maná” diario nuestra vida espriritual desfallece. El tiene exactamente la porción que necesitamos para cada día. ¿Qué estamos esperando para apropiarnos de esa comida?
Frente a mi computadora tengo este versiculo que ha sido siempre un recordatorio de que no debo descuidar el estudio y lectura de la Palabra de Dios diariamente: “Lámpara es a mis pies tu palabra, Y lumbrera a mi camino” Salmo 119:105. Estudiar la Biblia y leerla diariamente para mi se ha convertido en una aventura. Mi amor por la Palabra de Dios ha aumentado enormemente, ¡quiero conocerlo mas!
En El Rinconcito De La Paz te damos oportunidades para estudiar la Biblia a través de estudios bíblicos, devocionales y otros recursos. En la parte de arriba de esta página hay diferentes opciones para participar de estudios bíblicos que hemos hecho: Rut, Santiago,Ester, Sabiduría Ante Todo y otros más. El libro “De Cenizas a Belleza” ha sido escrito en forma de devocional diario que te ayudará en tu crecimiento espiritual. Adquiere tu copia hoy: “De Cenizas a Belleza”, puedes bajarlo a tu computadora fácilmente.
Por último, quiero dejar con ustedes unos cuantos beneficios que producen la lectura y el estudio de la Palabra de Dios en nuestras vidas. Sé que hay muchos más pero creo que estos pocos nos mostrarán el gran valor que tiene la Biblia. Dios te bendiga.
1. Descubrimos la mente y corazón de Dios cada día (Juan 17:3)
2. Somos confortados y animados (Juan 14:16)
3. Aprendemos a discernir muchas cosas y a diferenciar la Verdad de la mentira (Juan 8:32; Juan 14:6)
4. Nuestra fe se aviva y tiene significado (Juan 7:38)
5. Compartimos nuestra fe con otros (Mateo 28:18-20)
6. Somos obedientes a los mandatos de Dios (Miqueas 6:8)
7. Tenemos los recursos de Dios para vivir y no los nuestros (2 Cor. 3:5)
8. Podemos confiar en las muchas promesas de Dios (Jeremias 29:11)
9. Descubrimos el plan de Dios y propósito para nuestra vida (Is. 11:9; Hab. 2:14; Mateo 6:9-10)
10. Dios será glorificado por nuestro deseo de conocerlo y obedecer su Palabra (Salmo 42:1)
2. Somos confortados y animados (Juan 14:16)
3. Aprendemos a discernir muchas cosas y a diferenciar la Verdad de la mentira (Juan 8:32; Juan 14:6)
4. Nuestra fe se aviva y tiene significado (Juan 7:38)
5. Compartimos nuestra fe con otros (Mateo 28:18-20)
6. Somos obedientes a los mandatos de Dios (Miqueas 6:8)
7. Tenemos los recursos de Dios para vivir y no los nuestros (2 Cor. 3:5)
8. Podemos confiar en las muchas promesas de Dios (Jeremias 29:11)
9. Descubrimos el plan de Dios y propósito para nuestra vida (Is. 11:9; Hab. 2:14; Mateo 6:9-10)
10. Dios será glorificado por nuestro deseo de conocerlo y obedecer su Palabra (Salmo 42:1)
No hay comentarios:
Publicar un comentario