SALMO 24

29 noviembre 2017

Los Salmos

Capítulo 24

24:1 De Jehová es la tierra y su plenitud;
El mundo, y los que en él habitan.
24:2 Porque él la fundó sobre los mares,
Y la afirmó sobre los ríos.
24:3 ¿Quién subirá al monte de Jehová?
¿Y quién estará en su lugar santo?
24:4 El limpio de manos y puro de corazón;
El que no ha elevado su alma a cosas vanas,
Ni jurado con engaño.
24:5 El recibirá bendición de Jehová,
Y justicia del Dios de salvación.
24:6 Tal es la generación de los que le buscan,
De los que buscan tu rostro, oh Dios de Jacob. Selah
24:7 Alzad, oh puertas, vuestras cabezas,
Y alzaos vosotras, puertas eternas,
Y entrará el Rey de gloria.
24:8 ¿Quién es este Rey de gloria?
Jehová el fuerte y valiente,
Jehová el poderoso en batalla.
24:9 Alzad, oh puertas, vuestras cabezas,
Y alzaos vosotras, puertas eternas,
Y entrará el Rey de gloria.
24:10 ¿Quién es este Rey de gloria?
Jehová de los ejércitos,
El es el Rey de la gloria. Selah




Isaías 44:2

16 noviembre 2017

Yo soy Dios, tu creador; yo te formé desde antes que nacieras, y vengo en tu ayuda. 

»No tengas miedo, querido pueblo mío, tú eres mi fiel servidor, tú eres mi elegido.


EL VERDADERO ARREPENTIMIENTO.

Pregunta: "¿Qué es el arrepentimiento y es éste necesario para la salvación?"

Respuesta: 
Muchos entienden el término “arrepentimiento” como “volverse del pecado”. Esta no es la definición bíblica del arrepentimiento. En la Biblia, la palabra “arrepentirse” significa “cambiar tu mente.” La Biblia también nos dice que el verdadero arrepentimiento tendrá como resultado un cambio de conducta (Lucas 3:8-14Hechos 3:19). Hechos 26:20 declara, “sino que anuncié......, que se arrepintiesen y se convirtiesen a Dios, haciendo obras dignas de arrepentimiento.” La total definición bíblica del arrepentimiento, es cambiar de mentalidad, mismo que resulta en un cambio de acciones y actitudes.

¿Cuál es entonces la conexión entre el arrepentimiento y la salvación? El Libro de Los Hechos parece enfocarse especialmente en el arrepentimiento con respecto a la salvación. (Hechos 2:383:1911:1817:30;20:2126:20). El arrepentimiento, relacionado con la salvación, es cambiar tu parecer respecto a Jesucristo. En el sermón de Pedro en el día de Pentecostés (Hechos capítulo 2), él concluye con un llamado a la gente a arrepentirse (Hechos 2:38). ¿Arrepentirse de qué? Pedro está llamando a la gente que rechazaba a Jesús (Hechos 2:36), para que cambiaran su idea acerca de Él, que reconocieran que Él es verdaderamente “Señor y Cristo” (Hechos 2:36). Pedro está exhortando a la gente a cambiar su mentalidad del rechazo a Cristo como el Mesías, a la fe en Él como Mesías y Salvador. 

El arrepentimiento y la fe pueden ser entendidos como “dos lados de la misma moneda.” Es imposible poner tu fe en Jesucristo como el Salvador, sin primeramente cambiar tu mentalidad acerca de quién es Él, y lo que Él ha hecho. Ya sea el arrepentirse de un rechazo obstinado, o arrepentirse de ignorancia y desinterés – es un cambio de mentalidad. El arrepentimiento bíblico, en relación con la salvación, es cambiar tu mentalidad del rechazo a Cristo a la fe en Cristo. 

Es crucialmente importante que entendamos que el arrepentimiento no es una obra que hagamos para ganar la salvación. Nadie puede arrepentirse y venir a Dios, a menos que Dios atraiga a esa persona hacia Él (Juan 6:44). Hechos 5:31 y 11:17 indican que el arrepentimiento es algo que da Dios – sólo es posible por Su gracia. Nadie puede arrepentirse a menos que Dios le conceda el arrepentimiento. Toda la salvación, incluyendo el arrepentimiento y la fe, es el resultado de Dios acercándonos, abriendo nuestros ojos, y cambiando nuestros corazones. La paciencia de Dios nos conduce al arrepentimiento (2 Pedro 3:9), como lo hace Su bondad (Romanos 2:4).

Mientras que el arrepentimiento no es una obra que gana la salvación, el arrepentimiento para salvación da como resultado las obras. Es imposible verdadera y totalmente cambiar tu mentalidad sin que esto cause un cambio en tus actos. En la Biblia, el arrepentimiento resulta en un cambio de conducta. Esto es por lo que Juan el Bautista exhortaba a la gente con estas palabras, “Haced, pues, frutos dignos de arrepentimiento.” (Mateo 3:8). Una persona que verdaderamente se ha arrepentido de rechazar a Cristo y a la fe en Cristo, lo hará evidente por un cambio en su vida (2 Corintios 5:17Gálatas 5:19-23Santiago 2:14-26). El arrepentimiento, propiamente definido, es necesario para la salvación. El arrepentimiento bíblico es cambiar tu parecer acerca de Jesucristo y volverte a Dios en fe para salvación (Hechos 3:19). Volverse del pecado no es la definición del arrepentimiento, pero es uno de los resultados de la fe genuina basada en el arrepentimiento respecto al Señor Jesucristo.
Fuente: Got Questions.org!

SALMOS 30:

12 noviembre 2017

 Canto para la inauguración del templo. De David.

Señor, yo te alabo
porque tú me libertaste,
porque no has permitido
que mis enemigos se burlen de mí.
Señor, mi Dios,
te pedí ayuda, y me sanaste;
tú, Señor, me salvaste de la muerte;
me diste vida, me libraste de morir.
Ustedes, fieles del Señor, ¡cántenle himnos!,
¡alaben su santo nombre!
Porque su enojo dura un momento,
pero su buena voluntad, toda la vida.
Si lloramos por la noche,
por la mañana tendremos alegría.
Yo me sentí seguro, y pensé:
«Nada me hará caer jamás.»
Pero tú, Señor, en tu bondad
me habías afirmado en lugar seguro,
y apenas me negaste tu ayuda
el miedo me dejó confundido.
A ti, Señor, clamo;
a ti, Señor, suplico:
¿Qué se gana con que yo muera,
con que sea llevado al sepulcro?
¡El polvo no puede alabarte
ni hablar de tu fidelidad!
Señor, óyeme y ten compasión de mí;
Señor, ¡ayúdame!
Has cambiado en danzas mis lamentos;
me has quitado el luto
y me has vestido de fiesta.
Por eso, Señor y Dios,
no puedo quedarme en silencio:
¡te cantaré himnos de alabanza
y siempre te daré gracias!

CANTAR DE LOS CANTARES 6: 1.12

El feliz encuentro con el Amado
Coro
6:
1 ¿Adónde se ha ido tu amado, tú, la más hermosa de las mujeres?
¿Adónde se dirigió tu amado,
para que lo busquemos contigo?

La Amada6:2 Mi amado ha bajado a su jardín,
a los canteros perfumados,
para apacentar su rebaño en los jardines,
para recoger lirios.
6:3 ¡Mi amado es para mí,
y yo soy para mi amado,
que apacienta su rebaño entre los lirios!
El encanto incomparable de la Amada

Quinto canto
El Amado6:4 ¡Eres bella, amiga mía, como Tirsá,
hermosa como Jerusalén!
6:5 Aparta de mí tus ojos,
porque me fascinan.
Tus cabellos son un rebaño de cabras
que bajan por las laderas de Galaad.
6:6 Tus dientes, como un rebaño de ovejas
que acaban de bañarse:
todas ellas han tenido mellizos
y no hay ninguna estéril.
6:7 Como cortes de granada son tus mejillas,
detrás de tu velo.
6:8 Son sesenta las reinas,
ochenta las concubinas,
e innumerables las jóvenes.
6:9 Pero una sola es mi paloma, mi preciosa.
Ella es la única de su madre,
la preferida de la que la engendró:
al verla, la felicitan las jóvenes,
las reinas y concubinas la elogian.
6:10 "¿Quién es esa que surge como la aurora,
bella como la luna,
resplandeciente como el sol,
imponente como escuadrones con sus insignias?"

Encuentro sorpresivo con el Amado
La Amada6:11 Yo bajé al jardín de los nogales,
a ver los retoños del valle,
a ver si brotaba la viña,
si florecían los granados...
6:12 Y sin que yo me diera cuenta,
me encontré en la carroza con mi príncipe.

CANTAR DE LOS CANTARES- 4: 1-15

La belleza deslumbrante de la Amada
El Amado4:1 ¡Qué hermosa eres, amada mía, qué hermosa eres!
Tus ojos son palomas,
detrás de tu velo.
Tus cabellos, como un rebaño de cabras
que baja por las laderas de Galaad.
4:2 Tus dientes, como un rebaño de ovejas esquiladas
que acaban de bañarse:
todas ellas han tenido mellizos
y no hay ninguna estéril.
4:3 Como una cinta escarlata son tus labios
y tu boca es hermosa.
Como cortes de granada son tus mejillas,
detrás de tu velo.
4:4 Tu cuello es como la torre de David,
construida con piedras talladas:
de ella cuelgan mil escudos,
toda clase de armaduras de guerreros.
4:5 Tus pechos son como dos ciervos jóvenes,
mellizos de una gacela,
que pastan entre los lirios.
4:6 Antes que sople la brisa
y huyan las sombras,
iré a la montaña de la mirra,
a la colina del incienso.
4:7 Eres toda hermosa, amada mía,
y no tienes ningún defecto.
4:8 ¡Ven conmigo del Líbano, novia mía,
ven desde el Líbano!
Desciende desde la cumbre del Amaná,
desde las cimas del Sanir y del Hermón,
desde la guarida de los leones,
desde los montes de los leopardos.
4:9 ¡Me has robado el corazón
hermana mía, novia mía!
¡Me has robado el corazón
con una sola de tus miradas,
con una sola vuelta de tus collares!
4:10 ¡Qué hermosos son tus amores,
hermana mía, novia mía!
Tus amores son más deliciosos que el vino,
y el aroma de tus perfumes,
mejor que todos los ungüentos.
4:11 ¡Tus labios destilan miel pura,
novia mía!
Hay miel y leche bajo tu lengua,
y la fragancia de tus vestidos
es como el aroma del Líbano.
4:12 Eres un jardín cerrado
hermana mía, novia mía;
eres un jardín cerrado,
una fuente sellada.
4:13 Tus brotes son un vergel de granadas,
con frutos exquisitos:
alheña con nardos,
4:14 nardo y azafrán,
caña aromática y canela,
con todos los árboles de incienso,
mirra y áloe,
con los mejores perfumes.
4:15 ¡Fuente que riega los jardines,
manantial de agua viva,
que fluye desde el Líbano!

JOSUÉ: 24: 15


PAPÁ

06 noviembre 2017

Ejemplo de vida irreprochable
Amante como la mar en perfecta tranquilidad
Consecuente en tus palabras
Transparente y generoso como la naturaleza
Humilde como la noche lleno de estrellas
Sabio por loe días vividos en la tierra
Obediencia y sumisión a un Dios vivo
Alegre como cada mañana de primavera
Fe inquebrantable, mirando a la eternidad
Lector incansable de la Santa Palabra, la Biblia
Mensajero de las buenas nuevas de salvación
Caminante terco en los caminos de Dios
Exhortas y consuelas con temor de tu creador
Obra divina del supremo eterno,
Así eres tú…
Papá 


MAMÁ

Mamá
Madre, por donde estas
Ah, seguramente
Estás en tu dormitorio
De rodillas, orando
Al Señor por mí.

Mamá 
Ven Mamita, he vuelto
He vuelto a casa después
De muchos años
Mamá
Donde estas, Mamáaaa.

La última vez 
cuando te vi 
estabas de rodilla
Pidiéndole al Señor por mí,
Te escuchaba llorar
Repitiendo mí nombre.

Mamá
Ven, mírame mamita linda
Ayer nomas conocí a tu Dios,
Estoy aquí con el deseo de hablarte 
y decirte que  ya conocí a Jesús
Gracias a tus oraciones. 

Recuerdo cuando pedías a Dios por mi
 
Tocabas con tu mano mi frente 
Y con tus ojos humedecidos
Por tus lagrimas, le decías;
Señor, el es tuyo  
Dejo su vida en tus manos.

Nunca cesaste de orar.

Mamá, Mamá ven ya, sal de ahí
Ah! que haces tú ahí llorando
Porque tienes esa foto de mi Madre
Sujeta entre tus manos 
Porque me miras así,
No, no llores

Ve, ve y dile que ya
 regrese 
Dile que acepte a Jesucristo
Como mi Señor y Salvador de mi vida
Dile que quiero orar junto a ella
Ah! que dices, ya partió
A la presencia del Señor.

Madre
Dios escuchó tus oraciones 
tantas veces postrada de r
odillas 
con tu
 fe inquebrantable
Oraste por mi vida 
Hoy doy gracias a mi
 Dios
Por haberme dado una Madre
Tan linda, tan divina, Temerosa de Dios.