Fueron muchas las
veces que nos guiaste con tus sabios preceptos por el camino a seguir en busca
de la presencia de nuestro Señor y Salvador,
a lo largo del camino fuiste mas que un Pastor, un gran amigo.
Dios nos regaló la
presencia de un ser lleno del espíritu
Santo, al que nuestra Iglesia tuvo el alto honor en conocer, una persona que su
sola presencia irradia paz y respeto, fuiste, eres y serás siempre cordial con
todo aquel que se te acerque para dialogar o pedirte un consejo como
Pastor o hermano mayor.
Pastor José, hoy me enteré
que te marchas de nuestra Iglesia, siempre llevaremos adelante el
estandarte de la Fe que nos profesaste;
mientras sigamos vivos ella formara parte de nosotros, todos tus
consejos quedaran sellados en nuestros corazones, nuestros labios bendecirán
siempre tu ministerio a donde Dios nuestro Señor te lleve.
Cada gesto tuyo,
quedará grabado en nuestras retinas como
preludio eterno de las enseñanzas que nos compartiste, cada abrazo que nos diste quedará por siempre
impregnado en nuestro cuerpo, cada
mirada, cada sonrisa, sobre todo cada mensaje que Dios te dio para nosotros,
quedarán grabados en nuestras mentes para siempre.
No hay palabras para expresar lo que tú
significas para nosotros, solamente la franqueza de nuestro corazón, lleno de
amor, de ese amor que tú nos diste.
Vete tranquilo
Pastor José, que nosotros siempre
pediremos a nuestro Señor Jesucristo que guarde tus caminos, que cuide tu
Pastoreado para que así como en nuestra Iglesia de Huacho, sigas siempre siendo
como eres.
Hermana
Angélica, se siempre el bastón que sostenga el andar de mi gran amigo y
Pastor José Farroñay León, hombre justo,
consagrado al ministerio de Dios.
Dios
los Bendiga a ambos, así como a su preciosa hija.
Julio Solórzano
Murga.
Huacho 12 de
Diciembre de 2013
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